sábado, 26 de marzo de 2016

Nace la federación kurda de Siria

Los kurdos de Siria, ubicados en la región norteña que limita con Turquía, conocida como Rojava, han constituido una región federal en los territorios bajo su control desde que tuvieron que salir armados a defenderse de los embates de los yihadistas en la guerra que ha enlutado el país, incluyendo al Isis. 

El Gobierno de Damasco y la oposición coincidieron en rechazar la decisión, así como lo ha hecho Turquía, que obtuvo la exclusión de los kurdos de las negociaciones que en Ginebra intentan pacificar el conflicto sirio.
Sin embargo, la exclusión de las conversaciones de paz ha sido uno de los motivos que ha gatillado la decisión de los kurdos de crear una región autónoma. Lo ha aclarado Ibrahim Muslem, exponente del Partido de la Unión Democrática (PYD) al afirmar que “es evidente que al estar excluidos hemos tomado nuestras decisiones a favor de nuestro pueblo”. El YPG considera que el Gobierno sirio es dictatorial y la oposición está conformada de salafitas (fundamentalistas sunitas). Tampoco ha sido positiva la reacción de Washington, que ha apoyado a los kurdos en su lucha contra el Isis. La Casa Blanca hizo saber que no reconocería una región curda auto-gobernada. 
La situación no es de fácil solución. Los kurdos están esparcidos por Turquía, Siria e Iraq (además que en Irán). Su principal organización política turca, el PKK, es considerado terrorista por el Gobierno de Ankara, que tampoco desea un estado kurdo en Siria porque estarían en sus fronteras y porque muchos de los kurdos sirios son en realidad kurdos turcos que se exiliaron en su momento. Más aceptación tiene el kurdistán iraquí, que ya existe de facto y hasta cuenta con una representación diplomática estadounidense. Los kurdos iraquíes, más conservadores y nacionalistas, se han alineado con los Estados Unidos e Israel. Pensar en un traslado a Iraq de los kurdos de los demás país parece improbable.

 ¿Es el inicio de una partición de Siria? ¿O de la federalización también de Estados como Iraq y quizá Líbano? ¿Son categorías aceptadas por los sistemas políticos de estos países? Hasta hace poco, gobiernos fuertes, como el de Damasco o el de Iraq garantizaban la unidad nacional en Medio Oriente. Lo que duele es que el debate sobre estos temas se abre debido a conflictos armados instalados por intereses ajenos. Y quienes pagan el precio más alto son las poblaciones.

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